En los recuerdos habita nuestra infancia.
Y en ella está Pirulo.

martes, 31 de marzo de 2009

Pirulo Pirulín


En el siglo pasado nacieron unos cuantos, todo el mundo sabe
En el 29 del siglo pasado en una familia típica de entonces:
Italianos y checos en ese caso, nació Juan José Harych.
Tercer hijo (primero varón) de Lucía y Ladislao.
Dicho así suena aburrido pero no, no se aburrían, de hecho el matrimonio no fue tal hasta que nació Juan José, vivían en concubinato (¡oh pecado!) por principios.
El amor entre ellos nació en un pic-nic anarquista donde todas las convenciones burguesas estaban mal vistas,
ahora, como una cosa lleva a la otra al Viejo o sea a Don Ladislao se le hizo diícil conseguir trabajo viviendo bajo esos principios ...

ergo, tuvo que casarse.
Igual le dió lucha a las convenciones y la disputa era mas o menos así:
Lucía: -Tienen que ir a la escuela
Lado: - ¿para qué? ¿Para que le enseñen falsedades? no...no
Lo cierto es que Juan José fue un tiempo, en el otro lo expulsaban, volvía, lo volvían a echar y al final ganó Ladislao lo retuvo en su casa para enseñarle el valor de la literatura de Anatole France;
los versos de Espronceda;
las novelas de Zolá o las teorías de José Ingenieros.
El muchachito de la foto prefería el campito a el encierro.
Al muchachito de la foto lo castigaban disfrazándolo de nena para que no saliera.
¡ Y sí, adivinaron! se escapaba igual
Corría a visitar a sus vecinos que lo esperaban con grandes sanguches y humeantes tazas de leche para así aplacar ese hambre que venía atrasado

domingo, 29 de marzo de 2009

El ajedrez y la Defensa Siciliana


Supe del juego desde chiquita cuando por jugar una partida a mi Viejo se le olvidó de mi existencia y entré a caminar por las vías del tren.
Aún retengo la imagen de esa rubia grandota que me tomó de la mano y me dijo:
-"Yo a vos te conozco...¿qué haces solita por acá?"
y me llevó a casa.
Fueron mis inicios en el "juego ciencia".
Por las noches en casa sólo se lo veía al "hombre" cuando no había torneo y si se le escapaba la liebre y no se inscribía en ninguno, siempre era bueno el momento para despejar lo que hubiera sobre la mesa y deslizar el pesado elemento de madera donde se apoyaban los "cositos ésos" .
Moverlos, mirarlos, moverlos mirarlos moverlos mirarlos hasta que la cabeza necesitara soporte y ahí blandía su mano izquierda, codo sobre la mesa, cabeza sobre su mano...
Miraba como miraba el Sargento Saunders en Combate,( la serie) a los mapas para planificar el ataque y, efectivamente eso era: un ataque.
No sabía cual era el negocio estar ahí con cara de sufrimiento si se decía que era un juego.
Entonces no lo sabía, ahora lo sé: le gustaba sufrir
Fue así que con el correr de los años supe ver a mi Viejo ("el hombre") alterado, sonriente, ofuscado, soñador...siempre dependiendo su estado de ánimo del compás de las pérdidas o ganancias en las partidas.
También supe de grandes ausencias (torneos en el interior del país) o cortas ausencias (torneos de ping-pong de ajedrez por las noches).
El ajedrez fue el responsable de sus "no" presencias cuando estuve enferma, cuando mi Vieja estaba enferma, cuando había un cumpleaños y no se iba por algún torneo y así...años y años...
Cuando la Vieja murió sabía ubicarlo a Él como era lógico en el Club, un lugar de antología, una vidriera en donde se exponen los más maravillosos especímenes para estudiar.
El Viejo supo seguir llenando esos vacíos en ese Club y porque era despues de todo Su hogar, fuese donde fuese, se casara con quien se casara a todos y a todas siempre "nos visitó" pasó por nuestras vidas y siempre volvió a Su Club, Su hogar. Fue donde eligió vivir y donde lo hallaron una madrugada en el piso, cerca de los tableros que tantas veces vapuleó...
y ahí está todavía gritando ¡Jaque mate! para
todos

sábado, 28 de marzo de 2009

Tengo miedo

Empecé realmente a conocer a mi Viejo después de la muerte de Mami.
Ella me había mandado a manera de vaticinio lo difícil que iba ser la relación entre nosotros.
De eso no me cabían dudas, lejos estaba yo de imaginarme que iba a ser así debido a que nos parecíamos tanto, pero tanto tanto, que asusta, digamos que soy la versión mejorada, ejem...
De cualquier manera todo el mundo sabe lo que cuesta conocerse a uno mismo, peor cuando te ves reflejado en el otro sin saberlo, no lo perdonaba a mi Viejo como tampoco me perdonaba a mí, parece complicado pero no lo es tanto, al fin de cuentas ahora ya hecha toda una mujer voy viendo con más claridad el pasado, ese pasado siempre más claro que los presentes, ahora repaso miradas e imágenes que en su momento fueron secundarias y hoy pasan a ser sustanciales.
En este momento viene ante mis ojos y resuenan en mis oídos las letras de tangos que escuchaba diariamente de la voz de mi Papá, tangos que ensayaba para luego cantar en una peña o en una radio o simplemente en la calle.
Ahora entiendo el porqué de su reiteración y el porqué de esa elección poética: siempre estuvo enemorado de otra mina, siempre amó hasta en sueños a una sola mujer, por eso cantaba esto:


En la timba de la vida me planté con siete y medio,
siendo la única parada de la vida que acerté.
Yo ya estaba en la pendiente de la ruina, sin remedio,
pero un día dije planto y ese día me planté.
Yo dejé la barra rea de la eterna caravana,
me aparté de la milonga y su rante berretín;
con lo triste de mis noches, hice una hermosa mañana:
cementerio de mi vida convertido en un jardín.
Garsonier, carreras, timbas, copetines de vicioso
y cariños pasajeros, besos falsos de mujer...
todo enterré en el olvido del pasado bullicioso
por el cariño más alto que un hombre pueda tener.
Hoy, ya ves estoy tranquilo...por eso es que buenamente,
te suplico que no vengas a turbar mi dulce paz;
que me dejes con mi madre, que a su lado santamente,
edificaré otra vida, ya que me siento capaz.
Te suplico que me dejes, tengo miedo de encontrarte,
porque hay algo en mi existencia que no te puede olvidar...
tengo miedo de tus ojos, tengo miedo de besarte,
tengo miedo de quererte y de volver a empezar.
Sé buenita... no me busques...apartate de mi senda...
tal vez en otro cariño encontrés tu redención...
vos sabés que yo no quiero que mi chamuyo te ofenda...
¡es que tengo mucho miedo que me falle el corazón!
Si Celedonio Flores y Aguilar supieran cuántos porteños se iban a identificar con estas letras y esta música, dirían que estoy mintiendo...si supieran que para Pirulo mi Vieja era su madre y Enriqueta su jardín, si supieran...

La flor del cubanito

Cuando empecé a elaborar la idea de escribir sobre mi familia la persona más cercana a mí (y esto por muchas razones) fue mi Viejo, y cuando le comenté mi inquietud dijo muy suelto de cuerpo -"para qué hacer un libro sobre la familia...hacé un libro sobre mí..."


Así era Pirulo el ser más importante y central de cualquier historia (dicho por él ) el nudo de todas las novelas, el iluminador de grandes escenarios aunque fuesen sórdidos y oscuros, Él convertía en mágico hasta lo mas insulso, lo más trivial ,como era el cilindro crujiente que vendía disimulado con una brisa de dulce de leche.


Pirulo se destacó, a tal punto que realmente no podría resumir aquí en una sola entrada su vida.


Muchos en la Ciudad de San Martín aún piensan que sigue revoleando su bandeja, se sienten las pitadas de su silbato...sí, en serio! si van por la calle Belgrano cerca del mediodía van a ver aparecer una figura alta con guardapolvo blanco y birrete, y van a ver que en su bandeja de madera están grabadas las letras formando su nombre...


Y cuando escuchen una voz que dice..."Aquí llegó Pirulo, con una flor en el cubanito..." regalenlé una sonrisa que eso es el regalo más preciado que pueda recibir.


Desde ya muchas gracias


Vivi (la Pirula)

Hay olores y olores

Un olorcito fresco como una mañana recién comenzada, olorcito mezclado con mate cocido derramado sobre la hornalla, muy cerca de mis oídos un tango cantado por Floreal y acompañado por la voz de mi Viejo, todo esto claro marcado ruidosamente por las planchas que giraban para cocinar la masa de los cubanitos, a veces la música cambiaba y era un estridente Bethhoven (o como se escriba) con su quinta sinfonía, tan constante y consecuente que la podía bailar de memoria...
mi Viejo sudaba encorvado sobre las llamas con un molde en la mano en forma de cucurucho o el otro: un palito para enrollar los cubanitos, siempre recuerdo sus ilusiones, ésas las de vender mucho más y que la fábriquita fuese un éxito, ¿adivinen?
ajá...para que lo fuera hacían falta más manos trabajando y eso iba a ser imposible, Pastora no admitía hombres extraños en la casa, así que pasado un tiempo, se acabó el ensueño y la máquina pasó a mejor vida en manos de otro, un tal Gainza...
de todo eso me acordé hoy, escuchando a Bocacci en la radio y a fuer de ser sincera me hizo sentir segura como en mi casa materna, donde nada malo me podía pasar, donde el que se me acercaba era para darme afecto, sí como en mi casa al lado de Mamá y Papá, por eso esta mañana el olorcito me hizo sentir una vez más feliz.

Juan José y la pluma

Sin más prolegómenos voy a transcribir a continuación una carta escrita por mi Viejo al suyo:

A Don Ladislao "Campeón de la Libertad"
Me acuerdo de mi Viejo,¡ qué tipo macanudo! Desde siempre qué "Luchador"! que ardiente paladín de sus ideas y convicciones! Tenía un concepto hermoso de la libertad peleaba por todo lo que por lo cualquier razón lo privara de ella, solo admitía "Las cadenas al amor". Amor a su Mujer. A sus hijos. A sus amigos.
Era partidario del "No gobierno" y hasta que tuvo fuerzas y salud no transó con lo que de alguna manera viniese del "Estado" pero poco a poco lo fueron cambiando, pero qué va; lo quisieron cambiar y consiguieron solamente amargarlo. Yo incluso no tuve el coraje de ayudarlo. Y cobardemente lo fuimos metiendo en esa maraña de ípocrecia(sic) que el tanto habia combatido.
Viejo ¡ cuanto nos quisiste! para cuidarnos cuanto soportaste...sorportaste mas que nada a una mujer que nunca te comprendió y que de haber sido voz(sic) egoista la hubieras dejado. Pero voz no podias hacer eso; porque tenías moral.
Si querías la libertad, pero el amor a tus hijos te encandilaba
Para nosotros querias"Lo mejor", querías hacernos estudiar a todos!. Pero eran tiempos dificiles. Y entonces, trataste de hacer de tu hogar una escuela un lugar donde todos teniamos derecho a opinar y discutir ideas y conceptos, porque voz estabas firmemente convencido que: "De la discusion surge la luz"...Lo unico que conseguiste fue que tus hijos te subestimaran.
Pero voz no claudicaste seguiste luchando y de no ser por esa maldita enfermedad hubieras terminado cumpliendo con tus convicciones y no hubieras transado con esos ípocritas(sic) de siempre¿Pero que digo!
¡Nunca transaste con ellos!
Hasta el ultimo momento tuviste la valentía de elegir tu destino. Y entregaste tu cuerpo a la "hermosa libertad" que da lla "Muerte"! A los desesperados!
Juan José

A modo de presentación

Se sabe mucho de él, se sabe poco de Él
Cada ser que lo conoció tiene una versión diferente de su vida.
Creo que todos tienen la verdad porque sencillamente Pirulo era multifacético
Pirulo era curioso y quería aprender, aprender y aprender.
Por eso no se encasilló con una sola vocación.
Tenganme paciencia porque cada día descubro más cosas de él y prometo contarlas en detalle.